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Estás con una, con otra, con otra, con otra... Tu cuerpo pasa por pares y pares de manos. Y no son las mias. Tu boca pasa por muchos tipos de saliva diferentes. Y la mia no está entre ellas. Será que al final vas a ser para todas menos para mí. O quizá es que te estás dejando lo mejor para el final y te vas a quedar conmigo. Aunque después de estar tan usada, quizá no valgas la pena.